Blogging all day

¡Buenos días por la mañana!

Mientras leéis esto yo estoy pasando un fin de semana rural en Ávila pero mientras lo esbozaba y hacía las fotos estaba esperando a que el Bigotes llegase del cole y me recogiese con todos los bártulos para emprender la marcha... Me pareció un momento ideal para ponerme a bloguear. Ahora mismo remato el post en esta  cama ajena taaan cómoda mientras el Bigotes se ha ido a correr y yo me quito las legañas; nuestros amigos duermen...

Resulta que esta semana me lo he montado regular y no he podido publicar todo lo que me gustaría y eso me da mucha rabia. Tampoco he hecho deporte todos los días ni tengo la casa decente ni... bueno, que estoy disfrutando del fin de semana y no estoy aquí para llorar, jajaja.

Lo que iba a decir es que con todos estos pensamientos en la cabeza ayer abrí el cajón de las camisetas y lo vi claro: ¡la semana que viene tengo que bloguear sin parar! Jajaja.

La verdad es que mantener vivo un blog lleva mucho tiempo, que si la idea, las fotos, el texto, los comentarios... y oye, creo que hace años yo publicaba casi siempre en un pimpampúm, pero ahora no sé si me lo monto peor o es que busco un resultado medio decente, pero lo cierto es que ya no me sale tan rápido.

Y está claro que esto no es una obligación, es mi tiempo de ocio, así que lo ocupo en lo que quiero, así que el blog diario a veces me resulta complicadillo.

Sin embargo, tengo claro cuáles son mis prioridades y me siento muy bien cuando me dedico a ellas, así que (que me quiten lo bailao esta semana y) desde el lunes deporte y blogueo a tope, que lo estoy deseando y a ver cómo sale! :D

Os cuento esto con el modelito que llevé ayer y que no era más que la camiseta que compré en Forever 21 hace ya meses, una chaqueta de Romwe que ya está agotada y unos vaqueros que ¡flipa! compré en Costco sin probarme y me gustan un montóoooon. Son los pixie de Pepe Jeans y han sido un descubrimiento, porque ya sabéis que los G-Star son mis favoritos pero estos me costaron menos de la mitad y me gustan baaaastante. ¡Era lo último que me faltaba comprar en Costco, no me diréis! Jajaja.